Los agentes de la Dirección General de Aduanas-ARCA que estaban trabajando en el Paso Fronterizo Internacional Iguazú, de Misiones, con la ciudad brasileña de Foz de Iguazú notaron nerviosismo en una mujer cuando le tocó que le revisaran su automóvil.
La mujer venía de Ciudad del Este, en Paraguay. Les dijo al pasar la frontera que había ido a comprar útiles escolares y que no tenía nada para declarar. Los agentes apostados en el Puente Tancredo Neves iniciaron el control de rutina, no se imaginaban que dentro del vehículo había cerca de 25 mil pastillas de éxtasis valuadas en dos mil millones de pesos.
Cuando estaban por abrir el baúl del auto se acercó un hombre quien dijo ser la pareja de la mujer, que seguía nerviosa. El hombre les explicó a los agentes de la Aduana que se dirigían hacia Posadas en distintos autos.
Mientras el hombre les explicaba, por otro lado, comenzaron a revisar el interior del vehículo. Fue en la palanca de cambios que notaron que había sido manipulada. Al palpar la zona, notaron varios bultos, por lo que decidieron llevar el rodado al camión escáner.
Allí se reveló una gran cantidad de mercadería que estaba oculta en la carrocería. De inmediato dieron aviso al juez federal Miguel ángel Guerrero, a cargo del Juzgado Federal de Eldorado, quien ordenó desarmar el vehículo.
Cuando abrieron el auto notaron la presencia de varios paquetes envueltos en bolsas de nylon de color negro. Uno por uno fue revisado y analizado su contenido para establecer si se trataba de alguna sustancia ilegal. Finalmente, el narcotest indicó que se trataba de éxtasis.
En total se secuestró 13,2 kilos de droga en forma de cristales y 15,7 de pastillas. Fueron cerca de 25 mil unidades las incautadas. Los comprimidos llevaban inscripciones alusivas a las series Breaking Bad y La Casa de Papel.
Según informaron las fuentes aduaneras, el valor estimado de la mercadería secuestrada asciende a dos mil millones de pesos.
Tanto la conductora del vehículo como su presunta pareja fueron detenidos en calidad de incomunicados. Según establece el artículo 866 del Código Aduanero, podrían afrentar una pena de prisión de hasta 12 años.
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