domingo, 23 febrero, 2025
29.2 C
Rawson
InicioPolíticaJueces para la Corte: el Gobierno se quedó sin hoja de ruta

Jueces para la Corte: el Gobierno se quedó sin hoja de ruta

Pese a que en la Casa Rosada repiten a coro que el criptoescándalo en el que se vio envuelto el presidente Javier Milei y su hermana, Karina Milei es inocuo, las primeras consecuencias políticas comenzaron a sentirse en la semana que culmina.

Es que el vendaval de acusaciones que rodean a la figura del Presidente, y las casi nulas explicaciones sobre cómo llegó el jefe de Estado a promocionar una moneda digital sin antecedentes detonaron las conversaciones por el tratamiento del pliego del juez federal Ariel Lijo, en el Senado. Al momento, la Casa Rosada se quedó sin hoja de ruta y con la obligación de recalibrar su estrategia. Hay silencio y cautela.

El escándalo cripto inhibió al peronismo (clave por la cantidad de sus votos) de darle un triunfo político a Milei, al filo de la finalización del período de sesiones extraordinarias y en momentos en los que la agenda pública le es adversa. El Senado avanzó en la suspensión de las PASO y en otros temas de seguridad, pero no hubo acuerdo para tratar al postulante de la Casa Rosada a la Corte.

Esto no les gusta a los autoritarios

El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.

De esa manera, quedó trunco el plan del Gobierno para darle tratamiento a la candidatura del juez que acumula adhesiones y críticas por igual en el sistema político.

El miércoles pasado en una maniobra desesperada, la Casa Rosada había soltado un puñado de posibles nombres para reemplazar la candidatura del juez federal, a mitad de semana, cuando todos los caminos parecían bloqueados. Un racimo de académicos con perfiles similares al conservador, Manuel García Mansilla. Entre ellos, el nombre de una mujer que eligieron mantener en reserva. Ricardo Ramírez Calvo, Carlos Laplacette, Alberto Bianchi y Ricardo Rojas (quien había sonado para reemplazar a Rodolfo Barra), fueron los nombres que circularon.

Lejos de surtir efecto, Cristina Kirchner y su bloque de senadores continuaron bajándole el pulgar a Lijo y a la posibilidad de tratar su pliego en una sesión únicamente destinada a ello, ayer. La amenaza de que la Casa Rosada nombraría a los dos jueces más libertarios sobre “la faz de la tierra”, cayó en saco roto.

En ese marco, el pliego de García Mansilla debería salir por decreto la semana próxima, cuando Milei regrese de su viaje por los EE.UU. y estampe la firma. Ese era al menos el plan original, hasta que quedó trabado el pliego de Lijo.

De efectivizarlo, sacar el decreto antes del 1° de marzo, cuando el Congreso retome funciones y nombrarlo en comisión.

Con la estrategia dañada y una hoja de ruta sujeta a permanentes oscilaciones, algunas voces señalan que ahora, el pliego de Lijo podría ser tratado durante el período ordinario de sesiones, que comenzará el próximo sábado.

La condición sería la misma que puso el peronismo desde un inicio. Discutir la ampliación del Máximo Tribunal e incluir otros nombres de mayor afinidad al universo del peronismo y poder finalmente convalidar al nombre de García Mansilla, quien hasta acá no consiguió los firmas para su despacho.

El Presidente siempre quiso agotar la instancia de negociación legislativa con el nombre de Lijo, procurando no exponerse a críticas por una eventual designación por decreto. Con todo, los apoyos nunca llegaron y los integrantes del Máximo Tribunal estarán presentes el próximo sábado en el Congreso, cuando Milei dé inicio al período de sesiones ordinarias.

Más noticias
Noticias Relacionadas