Tras su primera remuneración como futbolista, el 10 no dudó en hacerle una demostración de amor a «Doña Tota» y la llevó a lo que se volvería un clásico de la gastronomía porteña.
-
El emotivo posteo de Giannina Maradona: «Gracias por enseñarme a ser leal»
-
Dalma Maradona recordó a su padre en el día de su cumpleaños: «Lo extraño todos los días»
Maradona gastó su primer sueldo como futbolista en agasajar a su mamá.
Diego Armando Maradona cumpliría hoy 64 años. Su fallecimiento en 2020 paralizó a todo un país que lo recordará para siempre en todas sus facetas. Y es que justamente lo maravilloso del personaje Maradona es que se pueden seguir pelando capas y nunca terminaremos de aprender una historia más sobre él.
Maradona.jpg
Indescriptible como pocos, «El Diego» fue uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos. La obtención de la Copa del Mundo de 1986 con Argentina y su paso por el Napoli quedaron marcados a fuego en la historia del deporte. Además, su forma de jugar, una mezcla de elegancia y potrero, cautivó a millones de personas en todo el mundo.
MARADONA Y DONA TOTA.jpg
Instagram Diego Maradona
Pero si por algo se caracterizaba el «10» era el amor por su madre, Dalma Salvadora Franco, mejor conocida como Doña Tota. Una hermosa anécdota junto a ella ocurrió cuando «Pelusa» tenía tan solo 17 años.
El día que Maradona gastó su primer sueldo en una comida con su mamá
Maradona debutó como profesional en Argentinos Juniors, y cuando recibió su primer sueldo ya tenía claro en quién lo iba a gastar. «Vamos a comer pizza», invitó a su mamá. Aquel joven que daba sus primeros pasos y ya comenzaba a deslumbrar a todos con su magia sintió la necesidad de devolverle al menos un gesto a Doña Tota por todo el esfuerzo que ella había hecho por su carrera futbolística.
Así fue que se dirigieron a La Rumba, una pizzería tradicional situada en Nueva Pompeya. “Me fui a una pizzería de Pompeya y me gasté todo el sueldo con mi vieja. Nos comimos y nos tomamos todo”, expresó Diego años después, con orgullo y emoción. Lo que fue una cena familiar se convirtió en una historia que quedará para la posteridad.
La Rumba, ubicada en Av. Sáenz 963, sigue recibiendo a sus comensales y también a aquellos curiosos que buscan conocer el lugar donde Maradona se gastó su primer sueldo en 1977. Además, cuenta con una ambientación futbolera en honor a él.