En plena carrera por alcanzar un dictamen en comisiones que le permita llevar a recinto el proyecto que contempla la privatización de Aerolíneas Argentinas, el Gobierno pierde nombres en la «compulsa» por la eventual venta de la estatal. Ocurre que, tal como ocurriera con LATAM, la brasileña Azul descartó competir por el control de la línea de bandera y señaló que pondrá el foco en fortalecer su posición en el mercado de cabotaje del país vecino. La firma en cuestión fue mencionada en torno a la cartera de Transporte como una de las aéreas sondeadas para acordar el probable traspaso de la aún estatal. Azul viene de alcanzar un acuerdo con acreedores que le permitirá hacerse con financiamiento fresco por hasta 500 millones de dólares.
La decisión de no competir por Aerolíneas Argentinas fue informada por John Rodgerson, CEO de la compañía brasileña, en el marco de la ALTA AGM & Airline Leaders Forum que se viene llevando a cabo en Nassau, Bahamas.
El ejecutivo sostuvo que la firma no buscará adquirir una participación en la estatal y que Azul no tiene previsto expandir sus operaciones en la Argentina. Según el medio brasileño Aeroin, representantes del Gobierno sostuvieron conversaciones preliminares con directivos de la aérea, pero Azul habría optado por seguir los pasos de LATAM y, de abrirse la puerta de la privatización, no ofertará por la estatal.
«… representantes del gobierno citaron conversaciones preliminares con empresas privadas, incluidas Azul y LATAM. Esta último incluso acabó desmintiendo los rumores después, y ahora el CEO de Azul ha reforzado que no tiene planes de expandir operaciones en Argentina y que el foco de la empresa sigue en el mercado brasileño«, indicó la fuente.
La decisión de Azul consolida a la colombiana Avianca como la principal candidata internacional a hacerse con la línea de bandera si prospera la privatización.
Quién está a la cabeza de los potenciales compradores de Aerolíneas Argentinas
La firma en cuestión, señalaron recientemente fuentes del país cafetero, entiende que hacerse con el control de la línea de bandera le permitiría dar un paso al frente en la disputa mercantil que sostiene con LATAM en la región. Avianca ya «venció» en territorio colombiano a operadores como Viva Air y Ultra Air.
Y apunta a volver a ocupar un lugar preponderante en el mapa de aerolíneas latinoamericanas. Avianca ya mantiene un trato estrecho con la directiva de Aerolíneas Argentinas: en julio pasado, Abra, la alianza que la colombiana mantiene con la brasileña Gol, rubricó un memorando que incluye la exploración de negocios en común con la estatal.
El pacto estableció, entre otros aspectos, la cooperación estratégica en cuestiones como los códigos compartidos, el intercambio de tecnología sensible y una vinculación entre los respectivos programas de pasajeros frecuentes y cargas.
Si Avianca finalmente se hace con el dominio accionario de Aerolíneas Argentinas y añade a esa relación su alianza con Gol, la región vería el nacimiento de un gigante aeronáutico: la colombiana posee 140 aviones, mientras que Gol suma 110 y la línea de bandera posee 81 unidades activas.
Ahora bien: hay aspectos que preocupan y mucho a los colombianos y sus aliados brasileños: la conflictividad gremial de la que hace gala Aerolíneas Argentinas invita a pensar que el desembarco de capitales extranjeros podría intensificar la ola de paros y movilizaciones promovidos por los trabajadores de la aérea.
Al mismo tiempo, la compañía muestra un tamaño exacerbado en términos de personal y burocracia interna, y ese aspecto implica un rojo financiero que ningún actor aerocomercial está dispuesto a afrontar. Sólo un saneamiento previo efectuado por el Gobierno podría hacer de Aerolíneas Argentinas un producto atractivo para otras empresas del rubro.
La privatización de Aerolíneas Argentinas y la discusión en el Congreso
A la par de este escenario, el gobierno de Javier Milei quiere avanzar lo más rápido posible con el proyecto para privatizar Aerolíneas Argentinas y este martes librará una pulseada que puede ser crucial para el futuro de la firma en la Cámara de Diputados, donde buscará emitir dictamen de comisiones con el apoyo del PRO y la UCR para que el tema pase a votarse próximamente en el recinto.
Las comisiones de Transporte y de Presupuesto y Hacienda que presiden la radical Pamela Verasay y el oficialista José Luis Espert, respectivamente, están reunidas desde la mañana. Recibirán a especialistas en la materia, pero el objetivo del oficialismo y sus aliados en este tema es «alcanzar el consenso y dictaminar».
El debate tendrá como telón de fondo el paro masivo de transporte que anunciaron los gremios para el miércoles y que afectará el servicio de vuelos, trenes, camiones y barcos. La medida de fuerza le mete una presión adicional a la discusión de Diputados sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas, dado que el intento de privatizar la empresa fue uno de los factores que la motivó.
Aunque Milei emitió un decreto que declara «sujeta a privatización» a la aerolínea estatal, la idea que se tiene es avanzar con el proyecto que presentó el diputado del PRO Hernán Lombardi para la venta de la aerolínea estatal, iniciativa muy similar a la impulsada por la Coalición Cívica.