Un estudio realizado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) mostró que, en el año 2022, se registraron 43.210 embarazos en mamás adolescentes de entre 15 y 19 años. De estos, según la encuesta, el 50% fueron no intencionales. Pero sobre este dato se monta otro: el 38% de este grupo de mamás adolescentes no logra terminar la escuela después de tener a su bebé.
Según el estudio “Consecuencias socioeconómicas del embarazo en la adolescencia en Argentina”, además solo el 1% de estas jóvenes accede a la universidad.
“El embarazo en la adolescencia no solo afecta a las jóvenes individualmente, sino que también genera impactos socioeconómicos a nivel estatal y comunitario. El empleo precario o la desocupación son comunes entre las madres adolescentes, lo que contribuye a la inequidad social y de género”, señaló Mariana Isasi, jefa de Oficina de UNFPA Argentina.
Por otro lado y en base al mismo informe agregó que en 2019 “se destinaron 140 millones de dólares a la atención del embarazo en la adolescencia, recursos que podrían haberse reinvertido en programas de prevención”. Ante esta problemática, la UNFPA junto con el Consejo Publicitario Argentino (CPA) lanzaron la campaña Una Charla Más Fácil, iniciativa que busca sensibilizar a los padres sobre el impacto positivo de generar espacios de conversación que aborden la salud sexual y reproductiva sin prejuicios y tabúes.
“A veces ocurre”, dijo Isasi, “que la vergüenza y la falta de conversación son la causa de que muchos adolescentes no accedan a la necesaria información sobre los cuidados para la prevención del embarazo no intencional. Por eso también presentaron una web para que las familias tengan datos para concretar esas charlas”.