Giuliano Simeone ingresó desde el banco de suplentes y no decepcionó. A solo dos minutos de haber entrado al campo, el hijo del Cholo se hizo presente en el marcador para poner el 4-1 de Argentina frente a Brasil en un partido correspondiente a la fecha 14 de las Eliminatorias Sudamericanas.
El gol llegó a los 26 minutos del segundo tiempo, cuando Nicolás Tagliafico envió un centro preciso desde la izquierda que el joven delantero del Atlético Madrid conectó por detrás de todos para desatar la euforia en el Estadio Monumental, en el marco de la fecha 14 de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026.
Simeone, quien había reemplazado a Thiago Almada minutos antes, demostró su olfato goleador y su capacidad para aprovechar cada oportunidad. La conexión con Tagliafico, otro de los puntos más altos de la Albiceleste, fue clave para que el atacante de 22 años sellara una noche inolvidable para los hinchas argentinos. Con este tanto, Argentina consolidó una goleada histórica frente a su clásico rival, mostrando un nivel arrollador tanto en el juego colectivo como en la efectividad frente al arco.
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