Los ñoquis de sémola son un clásico de la cocina italiana, especialmente de la región de Lazio, donde son conocidos como “Gnocchi alla Romana”. A diferencia de los tradicionales ñoquis de papa, se preparan con sémola de trigo, leche y queso, y se hornea hasta que una capa dorada y crujiente cubre la superficie.
Es un plato reconfortante y práctico, ideal para quienes buscan una receta sofisticada, pero rápida de elaborar. Con una larga tradición en la gastronomía romana, este plato se sirve como primer plato o “primo”, y es perfecto para ocasiones especiales o para disfrutar en días fríos.
Puede acompañarse con una ensalada verde o un vino blanco, logrando un equilibrio entre sencillez y elegancia. Su versatilidad permite combinarlo con distintos quesos y hierbas para realzar su sabor.
Esta receta comienza con una mezcla de leche caliente, manteca y sémola, cocinada hasta espesar. Se enriquece con queso y yemas de huevo, y luego se enfría antes de cortar la masa en discos.
Los ñoquis se colocan en una fuente, se cubren con queso y manteca, y se gratinan en el horno hasta obtener un dorado perfecto.
El resultado es un plato de textura suave en el interior y crujiente por fuera, que puede personalizarse con distintos quesos como Parmigiano, Reggiano o pecorino romano. Las hierbas frescas como la salvia o el tomillo son un complemento ideal para añadir un toque aromático.
La receta de ñoquis de sémola lleva un total aproximado de 50 minutos:
- Preparación de la masa: 20 minutos.
- Tiempo de reposo para enfriar la mezcla: 15 minutos.
- Tiempo de horneado: 15 minutos.
- 500 ml de leche entera.
- 125 g de sémola de trigo.
- 50 g de manteca (25 g para la mezcla y 25 g para gratinar).
- 50 g de queso parmesano rallado.
- 2 yemas de huevo.
- Sal a gusto.
- Nuez moscada a gusto.
- Pimienta blanca a gusto.
- Opcional: hojas de salvia o hierbas aromáticas para decorar.
- Calentar la leche en una olla a fuego medio junto con 25 g de manteca, una pizca de sal, nuez moscada y pimienta.
- Añadir la sémola en forma de lluvia mientras se remueve constantemente con un batidor para evitar grumos.
- Cocinar a fuego bajo, removiendo hasta que la mezcla espese y se despegue de las paredes de la olla (unos 5-7 minutos).
- Retirar del fuego e incorporar las yemas de huevo y 25 g de queso parmesano, mezclando hasta integrar por completo.
- Extender la masa sobre una bandeja forrada con papel de horno o ligeramente engrasada, formando una capa uniforme de aproximadamente 1 cm de grosor. Dejar enfriar por unos 15 minutos.
- Cortar discos de la masa con un cortador redondo o un vaso pequeño.
- Colocar los discos en una fuente para horno, ligeramente superpuestos.
- Espolvorear el queso parmesano restante sobre los ñoquis y distribuir trocitos de manteca por encima.
- Hornear en un horno precalentado a 200°C durante 15 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
- Servir caliente y decorar con hierbas aromáticas, si se desea.
Esta receta rinde aproximadamente 4 porciones como plato principal o 6 porciones si se sirve como entrada.
Cada porción de ñoquis de sémola contiene aproximadamente:
- Calorías: 300
- Grasas: 15 g
- Grasas saturadas: 9 g
- Carbohidratos: 28 g
- Azúcares: 5 g
- Proteínas: 12 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
Los ñoquis de sémola se pueden conservar en la heladera hasta por 3 días si se guardan en un recipiente hermético. Para recalentarlos, se recomienda el horno para mantener la textura crujiente.