Si a muchos hinchas de River se les escapó una sonrisa este sábado por la tarde tras la consagración de Racing en Asunción, fue por ver feliz a Juan Fernando Quintero Paniagua. La relación entre el colombiano y la gente, tan eterna como su gol en el Santiago Bernabéu, no cambió ni siquiera con Juanfer poniéndose la camiseta de otro grande del país que en los últimos meses también lo subió a su bandera. El colectivo riverplatense ya es también hincha de JFQ, quiere que le vaya bien, puede sentir el amor después del amor. Por eso, en el mundo River, incluidos claro los pasillos del Monumental, resonaron las declaraciones del zurdo tras ganar la Copa Sudamericana. Pensando en el pasado, pero también en el futuro.
“Racing confió en mí. Ustedes saben lo que viví con River, en su momento se hablaron muchas cosas, no pude seguir y Racing depositó la confianza en mí. Me esforcé, me bancaron en el momento difícil y salimos adelante”, dijo Quintero en medio de los festejos en la Nueva Olla. River es ineludible en la carrera y en la vida del #8 y en su descarga de este sábado dio a entender lo que en su momento se supo: Juanfer quiso continuar en el club en enero de 2023, quiso volver seis meses después tras un semestre agridulce en Junior y volvió a tirar una línea de comunicación para un posible regreso incluso este año ya en Racing, y sintió en todos los casos que el CARP, o en todo caso Martín Demichelis y la cúpula del fútbol del club, le cerró las puertas.
Hoy la situación es distinta, por varios motivos. Primero, porque Quintero aun después de muchos meses de críticas y miradas de reojo terminó siendo adoptado también por la comunidad racinguista y eso implica que un eventual tercer ciclo de Juanfer en Núñez necesitaría de un esfuerzo económico mayor al que pudo haber hecho River en las últimas ventanas de transferencias: desde Avellaneda avisan que JFQ, con contrato hasta diciembre de 2025, saldrá de Racing por una cifra que supere los u$s 4.000.000 (la Academia compró su pase en 3,6M dólares). En cualquier caso, no será un detalle el resultado de las elecciones en RC para las perspectivas de un Juanfer que se siente agradecido a Víctor Blanco.
Pero si la situación pensando en el futuro de Quintero ahora es diferente es, principalmente, porque a River volvió Marcelo Gallardo. El Muñeco no es sólo el entrenador que marcó la carrera del zurdo sino ya un amigo, un tipo con el que entabló una relación personal que excede a la profesional: la visita de MG a la clínica cuando Juanfer se rompió los ligamentos en 2019, la carta de despedida que le leyó el colombiano en el Monumental en la noche de su adiós, la invitación a pasar el cumpleaños de JFQ el 18/01/23 en su casa de Medellín, las charlas por las que la hija de Quintero lo llama, a sus espaldas, “abuelo” a Gallardo…
Juanfer Quintero y Gallardo, disfrutando en Medellín, en uno de sus tantos encuentros como amigos. (Instagram).
“Mi relación con él es conocida, él lo ha manifestado, siempre le tuve mucho cariño y respeto, más allá de mi exigencia con él. Sabe que tuvo que soportarme siendo exigido. Me pone muy contento su vigencia, lo quiero, es un futbolista que me gusta observar, me da alegría, me despierta emoción… Esos jugadores me gustan, por más que vista otra camiseta, lo quiero mucho y es de la familia riverplatense. Nunca se sabe lo que puede pasar…», contestaba el entrenador más ganador de la historia días después de que el héroe de Madrid la rompiera en las semis contra Corinthians.
El propio Gallardo, que ahora encabeza todas las decisiones que se toman en el fútbol del club, puede ser una llave para que el colombiano tenga, como tuvo el mismo Muñeco como futbolista, un tercer ciclo en el CARP. Nunca se sabe lo que puede pasar, dice, pero algo intuye: el nombre de Quintero en cualquier caso va a volver a resonar en el mercado de pases de River.
El golazo eterno de Juanfer Quintero en River
gol –
Golazo de Quintero para darlo vuelta
Mirá también
El boletín del plantel de River en este 2024
Mirá también