Revolucionó el fútbol y millones fueron invertidos en su ambicioso sueño deportivo de los 80.
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Loma Negra, el equipo de fútbol pionero en cuestiones de SAD.
En el mundo del fútbol y los millones que genera, el debate sobre las Sociedades Anónimas Deportivas está vigente. Bajo el gobierno de Milei, este modelo de gestión empresarial gana impulso, a pesar de la resistencia de figuras como Claudio “Chiqui” Tapia. En este contexto, la historia de Loma Negra, el primer equipo-empresa argentino, parece más relevante que nunca.
Las SAD, muy comunes en otros países, proponen un sistema donde los clubes operan con fines de lucro, algo que el presidente argentino apoya, pero que choca con el ideal de Tapia y la AFA de mantener a los clubes como asociaciones civiles. La historia de Loma Negra es un ejemplo temprano de este modelo en Argentina, un equipo que, en los años 80, dejó una marca imborrable en el fútbol nacional.
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Javier Milei y Claudio Tapia,enfrentados por cómo deberían funcionar los clubes de fútbol y los millones que reciben
La historia de Loma Negra
El equipo de Loma Negra, oriundo de Olavarría, fue fundado en 1929 como parte del club social de la localidad, apoyado por la cementera del mismo nombre. En 1980, luego de una tragedia climática, el equipo de fútbol recibió un impulso inesperado cuando Amalia Lacroze de Fortabat, heredera de la cementera y una de las mujeres más ricas de Argentina, decidió financiarlo. Con su apoyo, el club pudo reforzarse con jugadores de renombre, creando una especie de equipo de estrellas que marcaría un hito en la liga.
Loma Negra, con sus jugadores provenientes de Buenos Aires y respaldado por el capital de la cementera, comenzó a destacarse en torneos regionales y alcanzó el Nacional de 1981, compitiendo codo a codo con equipos de la Primera División. Sin embargo, este éxito despampanante también tendría sus desafíos y limitaciones.
Nacional 81 y 83: los torneos que llevaron a Loma Negra a la historia
El debut de Loma Negra en el Nacional de 1981 fue un evento histórico. Con un plantel renovado y potentes refuerzos, el equipo logró destacarse en el torneo. En su primer partido vencieron a Ferro, subcampeón del torneo Metropolitano, sorprendiendo a los medios y al público argentino. Durante el campeonato, Loma Negra mostró una solidez defensiva excepcional, no recibiendo goles en sus partidos como local y consiguiendo resultados notables ante equipos como River y Talleres.
A pesar de su destacada actuación, el equipo no avanzó a los cuartos de final debido a la diferencia de gol, quedando empatado en puntos con River. Sin embargo, el legado de su performance en 1981 quedó marcado en la historia del fútbol argentino. La gestión de Fortabat, inusual para un club, permitió a los jugadores vivir un lujo sin precedentes, con cenas opulentas, estadías en los mejores hoteles y un ambiente casi irreal para el fútbol de la época.
En 1983, el equipo volvió a sorprender, esta vez ganando su grupo de la primera ronda y superando a Argentinos Juniors en la segunda fase. Al llegar a octavos de final, derrotaron a Racing en el partido de ida, pero una dura derrota en el segundo encuentro terminó su aventura. Aunque breve, la historia de Loma Negra dejó una estadística extraordinaria: el equipo mantiene hasta hoy el mejor promedio de victorias en el profesionalismo.
Qué pasó con Loma Negra
La experiencia de Loma Negra como equipo-empresa fue breve pero impactante. Con el tiempo, la cementera dejó de invertir en el club, que regresó a sus raíces humildes. La falta de financiamiento hizo que el equipo no pudiera sostenerse en los torneos nacionales, y en 1985 su proyecto llegó a su fin.
Actualmente, el club sigue existiendo, aunque sin el esplendor de antaño. La empresa que le dio su nombre se mantiene en pie, pero el equipo de fútbol quedó como un recuerdo de aquellos años en los que Loma Negra hizo historia en el fútbol argentino.