El fin de semana largo y a modo de pasatiempo, los concursantes que llegaron hasta esta instancia de Gran Hermano encontraron en el juego de preguntas y respuestas una forma de conocerse más mientras se les hace más llevadero el encierro.
Así, en ese contexto, fue Darío Martínez Corti quien deslizó un comentario para Juliana Scaglione a quien le preguntó sobre su primer amor y que terminó haciendo que la doble de riesgo abra su corazón y confiese detalles que hacen a su intimidad y a ese vínculo afectivo tan particular.
Reclinándose en la silla en que estaba sentada, Furia lanzó: «Tenía 14 años y mi primer beso fue con una chica y me enamoré de una chica. Ahí empezó la joda porque yo venía de una familia muy católica. Yo hice locuras porque la llevé a casa como si fuera una amiga y no lo era».
«Mi papá se dio cuenta y me quería matar. Empezó el quilombo. Me dijo que estaba enferma, que estaba loca. La pasé feo, con esa chica con la que fui a una marcha gay, con la que me abrí al mundo. Yo no sabía si estaba bien lo que estaba haciendo pero yo lo sentía», continuó la polémica concursante.
EL GRAN RECUERDO SENTIMENTAL DE JULIANA
Siguiendo con su relato, Scaglione profundizó: “Venía de una familia católica y a mí mis papás me enseñaban `nene´y yo me conocí de otra manera…era muy duro no se podía caminar por la calle, me decían de todo, te gritaban lesbiana, torta de m***».
«Te lo gritan, por más que la sociedad muestra que las cosas cambiaron, todavía hay cosas para modificar, por ahí en Uruguay está todo más avanzado…acá me pasó que no se me sentaban al lado, mirá«, concluyó Furia luego de recordar ese primer e inolvidable amor.