Como se había anunciado con antelación, sonó el teléfono rojo en la casa de Gran Hermano. Y lo que sucedió es que Martín Ku y Nicolás Grosman accidentalmente lo rompieron al intentar contestarlo.
El privilegio de contestar el teléfono implicaba un beneficio único que al final, lo recibió Bautista Mascia y tuvo el poder de terminar de armar la placa de noninados y escuchar todos los votos a de días compañeros.
Es que el mismo consistirá en presenciar todas las nominaciones desde el SUM mientras disfrutaba de una cena, sin que el resto de la casa lo supiera, y luego emitir sus propios votos en el confesionario.
Debido a que el Chino y Nico dañaron el teléfono, Santiago del Moro anunció que ninguno de los dos recibiría ese beneficio. En su lugar, les indicó que debían elegir a uno de sus compañeros para que recibiera el premio en su nombre.
Martín y Nico optaron por Bautista, por lo que el conductor de Gran Hermano le informó que su recompensa era la cena especial. Posteriormente, en privado en el SUM, Santi le reveló la verdad: «Tendrás la oportunidad de observar y escuchar todo, y luego nominarás en último lugar en función de lo que hayas presenciado. Después de salir del confesionario, puedes optar por contar lo que viste o mantenerlo en secreto, según tu elección».
LOS VOTOS DE BAUTISTA MASCIA
Después de escuchar a todos jugadores y analizar los argumentos de los votos, el uruguayo optó po darle 2 votos a Emmanuel y 1 a Darío. Si bien supo que él ya estaba nominado, eligió a Darío porque sabía que no estaba en placa y al estilista por su mala relación dentro de la casa.