Un reconocido jugador de polo enfrenta una grave acusación por contrabando y evasión fiscal que despertó una fuerte repercusión en el ambiente. Se trata del uruguayo Matías Carrique, quien fue acusado por presuntas prácticas ilegales, incluyendo la transacción de caballos en el mercado blue, sobrefacturación y evasión de impuestos.
De acuerdo a lo que trascendió, el polista, que hace unas semanas se consagró campeón en el Abierto Uruguayo de Polo, habría enviado equinos ilegalmente al exterior, incluyendo destinos exclusivos como Saint Tropez en Francia, donde compite en el club propiedad del magnate Alshair Fiyaz.
La sospecha es que Carrique compró los caballos en Argentina y Uruguay, y los vendió a través de maniobras irregulares que implican evasión de impuestos, sobrefacturación y contrabando.
Al parecer, estas acusaciones también se extienden a su vínculo comercial con el propietario del Club de Polo El Milagro en Uruguay y del Banco Puente, que tiene presencia en varios países.
Según indicaron las fuentes, las acusaciones por las presuntas estafas se dan tanto en Uruguay como en Argentina. De acuerdo a los voceros, hace unos años la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) inició una investigación contra el polista por una serie de denuncias contra empresas y personas relacionadas con la exportación de caballos de polo, con cargos que incluyen contrabando documentado, subfacturación y evasión fiscal del impuesto a las ganancias.
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La causa en cuestión estuvo a cargo de la Fiscalía Penal Económica de Miguel Schamun, del Juzgado Penal Económico, a cargo de Rafael Caputo.
Otros casos
Este no es el primer escándalo por evasión en el mundo del polo. En el año 2007, por ejemplo, la Aduana inició una investigación por «contrabando agravado» contra la empresa Equus Trade, por ese entonces a cargo del ex polista Horacio Laprida, marido y socio de María Eugenia Fernández Rousse.
En octubre de 2015, la AFIP denunció a doce empresas y treinta particulares por presuntas maniobras de evasión en la exportación de caballos de polo, por un millón y medio de dólares, aproximadamente.
En estas denuncias por contrabando, subfacturación y triangulación figuraban Ellerstina, La Dolfina S.A., del polista Adolfo Cambiaso, Unicorn y Equus Trade.
LN/ff